viernes, 4 de septiembre de 2020

Miedo

El miedo hace volar. Káal'el 

El miedo es lo opuesto al amor pues a diferencia de éste que todo lo integra, el miedo todo lo repele. 
Se toma al miedo como algo malo, pues es lo que no se desea y lo que se evita. De hecho, tal vez no exista nada a lo que todo ser vivo rehúya más, pues forma parte de su mecanismo de protección básico para la supervivencia del ego pues, sin el miedo, no existiríamos mucho tiempo vivos y sin vida no tendríamos expansión que es lo buscamos como seres vivos y forma parte de nuestro regreso a la fuente y la integración. 

El miedo es un instrumento que nos ayuda a conocernos a nosotros mismos, pues sin él no podemos entender el amor pues ambos son opuestos y, por ende, inseparables y van ligados. En otras palabras: Por contraste, no podríamos conocer uno si no hubiésemos conocido el otro. 
Esto es así pues, al experimentar el miedo, apreciamos, sentimos y valoramos el amor. 

El amor es integración, mientras que el miedo es fragmentación. 
Cuanto más separados de la fuente se esté, más miedo se tendrá. 
El miedo es necesario para experimentar el amor, al menos mientras no estemos totalmente integrados a la fuente que lo es todo y todo lo incluye. 
Toda experiencia conlleva un contraste y un elemento de desconcierto que se puede traducir en miedo. Sin miedo no hay vida.


El miedo debe trascenderse, al igual que el ego, pues de ninguno de los dos se logra escapar, ni tampoco son algo malo. 
Debemos aprender a enfrentar nuestros miedos, analizando la causa que los produce pues, de lo contrario, nos perseguirá por siempre. 
Si huimos de él, lo encontraremos a la vuelta de la esquina esperándonos para enfrentarnos. 
El enfrentarlo es enfrentarse nuestras sombras, las razones para obtener lo que no deseamos. Y esto es así pues el miedo surge de nosotros mismos, de nuestra conciencia, por eso huir no funciona pues no podemos huir de nosotros mismos. 

Cuando enfrentamos el miedo nos damos cuenta que todo era una ilusión el amor y la integración son la verdad. 
El miedo es el reflejo de lo que uno anticipa a que pase, lo que creemos va a pasar pero que no tiene necesariamente que pasar. 
El miedo es la inseguridad de la capacidad para enfrentarse a un problema

El trabajo de sombras forzado es una excelente herramienta para combatir el miedo, pues al enfrenarlo se percibe que solo es una ilusión y con ello se lo integra. La persona adquiere audacia y coraje para nuevos retos. Libera la resistencia a tener miedo. 

Con el tiempo y cuando ya se haya logrado enfrentar todas las sombras se habrá integrado todo lo que hay por aprender en esta encarnación y ese será el momento exacto en el que se dará cuenta de que ya se está muerto. Esto es así pues si todo está integrado es porque ya no estás dividido y has regresado a la fuente donde todo es amor. 

Es muy importante interiorizar, como dice la trillada frase “conócete a ti mismo”, porque cuando escarbas en tu interior, por así decirlo, llegas al punto real de lo que te causa el miedo, pero solo lo puedes lograrlo si realmente te conoces. A veces te preguntas: ¿Por qué siempre reacciono así ante esta situación? Simplemente porque no has mirado en lo profundo de tu interior. 
Y la vida está hecha de tal manera que la expansión solo puede desarrollarse si procedes a quitarte miedo. El ir eliminando el miedo de tu vida es lo mismo que integración. Más amor, menos miedo; no deseas enfrentarte a ti misma quién genera ese miedo. 

Puedes estar repitiendo una y otra vez errores o comportamientos que realmente no deseas, ¿pero qué pasa realmente? Que muchas veces los pides y los deseas inconscientemente creando un conflicto dentro de ti, una ambivalencia.  
Aun así tienes una resistencia a ellos, a afrontarlos, a temerlos, pero la única manera es hacerles frente y dejar de resistirse, porque a lo que te resistes persiste y te mantiene enfrascado repitiendo lo mismo. 

Debes ir hacia el miedo entendiendo que nada está fuera de tu control, tú lo controlas y nada puede pasar por encima de ti si tú no lo quieres, pues tienes el control absoluto y real de ti mismo. 
Ir hacia el miedo es decirte a ti mismo que no le temes al miedo pues sabes cómo enfrentarlo toda vez que tienes el arma más poderosa: autoconocimiento. 
Esa actitud de enfrentar los miedos y de tomar el control es el camino a la integración y para eso tienes que analizar tus miedos haciendo trabajo de sombras; usar tus miedos como mecanismo de supervivencia sin ignorarlos y sin intentar suprimirlos porque son un indicativo claro de hacia donde no debes ir. 
Ignorar los miedos solo te provocará más problemas y por lo tanto más miedo. 

Miedo a lo desconocido 
A partir del autoconocimiento te conoces pues has hecho trabajo de sombras, te has enfrentado a tus miedos y ya no los atraes para ti pues ya los conoces, y sólo se teme a lo desconocido. 
A los peligros conocidos se pierde el miedo pues se los evita. De esta manera no pondrás el dedo en la llama del fuego pues sabes que te quemarás y para qué hacerlo si ya conoces el resultado? 
Del mismo modo podrás tener miedo a un virus y al 5G sencillamente porque desconoces sus alcances. 

Vivir con valentía 
Los hombres de actitud muy masculina confunden la valentía con la ausencia de miedo, pues no puede estar vivo sin temer. 
El valor es la habilidad de enfrentar los miedos promoviendo a persona hacia la expansión pues la enfoca con su atención hacia lo que desea y no hacia lo que no. 
Si una persona tiene miedo destinará toda su atención hacia ese sentimiento y manifestará más de lo mismo por la ley de los espejos. 

Sin embargo, nunca podrás escapar de tus miedos pues son parte inseparable de la vida toda vez que es el mecanismo de protección de tu ego y sin él morirías muy rápido porque no te quitarías del paso de las amenazas.  
El objetivo es trascenderlo tal como lo haces al no tocar una cerilla encendida pues ya sabes que te quemarás. El hecho de que no la toques es porque has trascendido ese miedo al enfrentarlo, y aún así respetas la llama al no tocarla. Esos son miedos procesados que están ahí pero no ya no representan un problema para ti sino sólo un indicativo del nivel de evolución espiritual que tienes, tu forma de ser y de enfrentarte a quien eres con valor. 


El enfocarse en el miedo baja la frecuencia, pero ¿cómo saber lo que la eleva si no te atreves a ver y a enfrentar tus miedos?. La integración lo incluye todo, incluido lo que tanto temes. Por eso, cuando te enfrentas a tus miedos los disuelves pues sólo son una ilusión. Esa actitud te sube la frecuencia porque has integrado a tu ser eso que antes temías. 
Solo te da miedo aquello que no has comprendido aún
El miedo es producto de lo que aún no has integrado y ves como peligro a tu integridad. 
Enfrentarlo es integrarlo a tí, aceptarlo y no intentar suprimirlo. 

Ser precavidos 
No debe confundirse el miedo con la precaución. 

Si caminas por una superficie de hielo y te caes, tal vez luego decidas no volver a pisar ese suelo por temor a caer en un agujero y perder la vida. 
Este temor aparece porque perdiste la confianza en ti mismo al caminar sobre la superficie de hielo. 
Tienes precaución porque temes eso a lo cual la aplicas, pues la precaución es un mecanismo para entender precisamente lo que te hizo desarrollar el miedo. 
Sin embargo, ahora decides analizar esa situación hasta comprenderla y entiendes los lugares por donde pisar y por donde no, pudiendo volver a caminar por esas superficies sin temor alguno. Has trascendido ese miedo. 
¿Y cómo investigaste lo que pasó? con precaución
Si hubieras huido y no hubieras analizado la situación, no volverías a caminar por superficies heladas pues sólo hubieras afianzado el miedo a dichas superficies. Del mismo modo, si te hubieses ido a vivir a Ecuador, jamás hubiese resuelto perder el miedo al hielo. 

Miedo colectivo 
Para que un virus inofensivo se convierta en letal es importante que se propague también mediáticamente causando temor a la población. 
La manifestación de un miedo colectivo que recibe mucha atención origina un egregor, una tulpa colectiva
El virus es un egregor colectivo creado por los humanos, el reflejo de la psique colectiva. 
La vacuna solo creará o manifestará más egregores. 

Los humanos crean egregores negativos porque ponen su atención en ello centralizando el miedo, lo que temen, y al poner toda la atención allí también concentran todo el poder de manifestación. 
Esto da lugar a los seres regresivos sin alma que necesitan alimentarse del miedo de los seres con alma, de su lux, la cual no es tangible como una sustancia pues sólo es atención creadora. 
Esos seres no tienen alma porque son regresivos, lo opuesto a la fuente, al amor y a la integración y, por ende, no pueden crearse a sí mismos sino que sólo existen como producto de otro ser con conciencia creadora y conexión a la fuente. 
Dependen de estos seres para sustentarse en una realidad ilusoria como lo es el 3D. 
Por ello no existe tal cosa como los controladores, pues la persona misma con alma es la que los manifiesta. 

La manifestación de un egregor colectivo negativo es el control mental usado como estrategia de seres regresivos sin conexión a la fuente a fin de recibir más atención creadora de parte de la población humana; sin esa atención se disolverán. 
La atención creadora es su alimento. 

La situación de miedo actual es solo es el reflejo de la psique colectiva. 
Si la población dejara de temerle al virus, éste se disolvería. 
Actualmente el miedo concentra la atención hacia lo que no se desea y por la ley de los espejos se refleja aquello a lo que se le da mayor atención. 
Si la población humana se enfocara en el amor, ése sería el mensaje que llegaría al campo de energía potencial. Sin embargo, no es el amor lo que más abunda en la Tierra sino el miedo, el cual es el reflejo mismo del interior colectivo. 

El hecho de que muchos humanos permanezcan vivos es porque así se ha programado desde planos superiores, desde donde verdaderamente son, porque la muerte no es mala ni es el final, no es la destrucción del yo; al contrario: es despertar, regresar a casa. 
No puede haber vida sin muerte pues ésta es una liberación total, un éxtasis espiritual, expansión y liberación, el volver a ser la fuente misma. Por eso se experimenta una sensación de amor total tan denso que te envuelve como una frazada o cobija caliente.
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Importante: Este material ha sido extraído de los vídeos originales que se citan al pie, compilado y modificado en su sintaxis por "taygeteanos", sin quitar la esencia del mensaje original. 
Véase la transcripción oficial, original y completa efectuada por Toni Ruiz de Sociedad Taygeta
Información provista por S'Warúu, de Erra y por Nai’Shara 

Vídeos originales: 
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