Temario
Formas de vuelo según la maniobra
Locación exacta de destino: Contexto
Convertirse en el destino, Desaparecer
y volver a aparecer, No existen las distancias, Espacio y tiempo superpuestos
Mapeando el universo
Flujos gravitatorios, Naves acordes al
mapeo, Ordenador cuántico, Mucho por mapear
_______________________________________
Formas de vuelo según la maniobra
Un avión terrestre consigue empuje o
potencia ya sea de motores jet o de motores a hélice, por lo que su estabilidad
y guía en vuelo se produce por la manipulación del aire que pasa a través del
ala por medio de partes móviles llamadas superficies de control, alerones o
flaps, los cuales no pueden ser utilizados en el espacio pues no resultan
útiles a grandes velocidades, aún en vuelo atmosférico.
En cambio, en las naves taygeteanas sus
motores de impulso magnético producen energía de propulsión que se combinan con
el uso de los motores de manipulación gravitatoria para maniobrar o dirigir una
nave o bien hacerla cambiar de curso.
Si bien podrían usarse motores cohete
pequeños para el mismo efecto, resulta más práctico el uso de motores
gravitatorios como medio de control de maniobras.
Estos motores reemplazan las
superficies de control, alerones y flaps y se pueden usar tanto en vuelo
atmosférico como en vuelo espacial por igual.
Además de los 2 motores principales,
una nave de caza grande como Suzy, cuenta con 2 motores de impulso magnético
retráctiles que sirven tanto para acelerar el despegue como para remolcar o
mover carga pesada de forma cinética no gravitatoria.
Obviamente la maniobra de precisión no
se asemeja en lo más mínimo a un Jet Harrier con su subsiguiente cohete hacia
abajo, rugiendo y levantando una gran cantidad de polvo y escombros volando por
los aires alrededor de la zona de descenso.
(El Harrier, también llamado Harrier
Jump Jet o el Jump Jet, es un avión a reacción militar de diseño británico
capaz de realizar despegues y aterrizajes verticales/cortos, mediante empuje
vectorial).
Tal como se ha visto, una nave grande
de caza o superior funciona combinando 3 formas de vuelo según resulte
necesario y según la maniobra a efectuar: dos medios de propulsión
(gravitatoria, acción-reacción) y toroide de alta energía para vuelo
supra-luminar.
Si una nave grande de 2.000 metros de
largo (7 portaaviones) y de 20 millones de toneladas de acero y titanio inicia
un descenso a superficie, requiere de maniobras de aterrizaje que resultan
delicadas.
Cuando una nave de caza o superior
entra a atmósfera, por ejemplo al aproximarse a puerto en Temmer, funcionará
casi exclusivamente con motores gravitatorios toda vez que éstos resultan menos
invasivos para la población.
Típicamente, una nave despegará de la
superficie usando los motores gravitatorios y ya a 20.000 metros o más en
altura, encenderá los Jet de plasma grandes para salir a la atmósfera.
Una vez tome velocidad hasta unos 40 o
50.000 Km/seg, encenderá el toroide y saltará al híper espacio.
Al descender del híper espacio apagará
el toroide y descenderá de entre unos 100.000 a 50.000 Km/seg., encendiendo los
motores frontales de Jet de plasma a manera de retro-cohetes, o bien usando
motores gravitatorios a manera de frenar la nave.
_______________________________________
Locación exacta de destino: Contexto
Un mapa numérico interpreta frecuencias
específicas de cada lugar, un sector espacial fijo, tal como una fotografía.
Sin embargo, el universo es siempre dinámico y cambiante donde lo único
constante, es el cambio.
Por dicho motivo, al viajar en modo supra-luminar,
no solo se debe dar a la computadora la frecuencia del destino, sino también el
dato de cuándo debemos arribar a él.
Existe un tercer factor a introducir en
la computadora de navegación y es el Ho’dee’zá, que se puede traducir al
castellano como paralaje (parallax en inglés). Este factor la dará a la
computadora de navegación el dato de: desde qué dirección deberá aproximarse al
destino la nave cuando descienda del hiperespacio o vuelo supra-luminar.
Dato Bil’h: 14,83002Dz (Tierra), destino,
en taygeteano
Dato Na’al: cuándo, en
taygeteano.
Dato Ho’dee’zá: desde qué dirección del
hiperespacio la nave arribará a destino.
Las interacciones matemáticas
específicas y sus interacciones entre sí creando una sopa compleja de armónicos
de frecuencia dentro del éter se define como locación o lugar.
De esta manera, la esquina de una
ciudad con sus postes de luz, banquetas, casetas telefónicas, tomas de agua
para bomberos y cada pequeño detalle por igual, resultará en una combinación de
interacciones específicas que resulten en una percepción de objetos sólidos
interactuando entre sí dentro de un espacio y a través de un marco
temporal.
Los vehículos y las personas
transitando por ese lugar también son patrones energéticos resultado de sus
propios armónicos de frecuencias dentro del mismo campo de energía potencial,
en una continua e incansable interacción entre sí a un ritmo temporal
específico que les es dado por la interpretación personal del
observador-conciencia y también por la suma de personas-observadoras o
colectivo que, por su misma capacidad de percepción y de procesamiento de
datos, viven o comparten una misma densidad existencial.
Todas estas frecuencias y los armónicos
que las componen son exactas, nunca se repiten y jamás son iguales a otras, por
lo que se interpretan como una locación exacta dentro del
espacio-tiempo y guiar una nave a su destino exacto.
La locación y sus armónicos de
frecuencia pueden ser tan pequeños como un átomo o tan grandes y complejos como
una galaxia o como el universo entero, añadiendo complejidad progresivamente a
medida que se expande.
La exacta armónica de la frecuencia de,
por ejemplo, un planeta dentro del éter –que la ciencia terrestre denomina
“continuidad espacio-temporal”-, es un lugar o posición exacta dentro de un
mapa estelar, datos exactos que se introducirán al ordenador de navegación de
la nave espacial para proporcionar el destino.
Los objetos se representan con un valor
numérico aunque estén conectados con las situaciones que pueden ser
circunstancias existentes dentro de un campo y dentro de cierto contexto que es
único.
Del mismo modo, una situación en una
determinada locación dentro de cualquier contexto sea pasado, presente o futuro
por igual, también puede representarse con un valor numérico ya que todas son
el resultado de construcciones matemático-armónico-frecuenciales.
En otras palabras: No hay pasado, no
hay presente, ni hay futuro; sólo armónicos de frecuencias dentro de un campo
y, por lo tanto, reproducibles y repetibles reproduciendo las frecuencias
exactas y sus armónicos correspondientes al lugar o situación, lo que también
define el destino al que se llegará pues esa frecuencia y sus armónicos no sólo
lo representan sino que son ese destino exactamente.
El contexto es el área o locación de
arribo y es el resultado de todas las interacciones de todas las frecuencias
del lugar, completas, con todas los armónicos de una frecuencia y todas las
interacciones y dinámicas entre sí, representado como una compleja secuencia de
interacciones matemáticas las cuales, entre más complejas sean, más detalles
representarán.
Convertirse en el destino
El principio que marca que al igualar
una frecuencia te conviertes en más de lo mismo se aplica también en la
navegación de naves estelares pues los motores igualan la frecuencia del
destino con suficiente exactitud para convertirse en parte de él y, de esta
manera, la nave llega a su destino.
El concepto de viajar al pasado o al
futuro está en las mentes humanas, no en el universo, pues da lo mismo viajar
10.000 años atrás que a esta misma mañana.
Al conocer la frecuencia del destino,
se la iguala con los motores de la nave y ésta y todo lo que está en su
interior se convierte en esa frecuencia destino también.
El igualar la frecuencia de destino es
comparable a mover la perilla de una radio a fin de localizar o sintonizar una
estación en particular. El prestar atención a esa estación no implica que el
resto de las emisoras hayan desaparecido pues ellas siguen allí, y si no se
perciben es porque están en otra frecuencia.
De igual manera la nave es el
sintonizador que selecciona el destino que siempre estuvo allí, como
pre-escrito, pero con una infinita cantidad de posibilidades de futuro que
también ya están escritas.
Desaparecer y volver a aparecer
Desde el éter no hay volumen ni
distancias pues todo existe y está entrelazado en un mismo espacio, y solo
separado por el velo de la percepción el cual es el límite que todas las
conciencias poseen.
La nave tiene en su ordenador un mapa
de frecuencias exactas. A voluntad, se envuelve a si misma dentro de un toroide
de alta energía de frecuencias controladas con extrema exactitud y precisión
que la hace energéticamente incompatible con su lugar de origen, por lo que
ésta se vuelve inexistente en el lugar del que salió y salta al éter. En otras
palabras: desaparece de su origen.
En el éter –y por el principio de
frecuencias dominantes-, la frecuencia exacta energética del toroide controlado
por el ordenador se impone sobre la nave misma volviendo todo lo que está
dentro de ella en energía potencial y conteniéndola dentro de una burbuja
artificial que aún conserva toda la información de los armónicos de sus
frecuencias que mantienen la energía en forma de nave y sus ocupantes.
Desde el éter vuelve a modificar los
armónicos de sus frecuencias en forma artificial para volverse compatible con
el lugar de su destino y allí manifestarse físicamente.
Los armónicos del motor de la nave
espacial funcionan exactamente igual que el espíritu y la conciencia, emulados
con aceleradores de nano-partículas que imitan neuronas como las de un ser
biológico con un alma.
No existe ningún movimiento a través
del espacio; no hay desplazamiento, ni distancias que recorrer pues desde el
éter todo es y todo lo que existe, tal como el universo entero, está contenido
dentro del éter de esa manera sobrepuesta.
No existen las distancias
Todo lo que existe está ocupando el
mismo espacio, entrelazado como la urdimbre de una tela. Solo cambia el lugar
donde se es compatible según los armónicos, que son frecuencias y vibraciones
y, donde se es compatible, es donde se está.
No existen distancias desde el éter
pues todo es una idea, una frecuencia. Da lo mismo estar en las Pléyades, en la
Tierra o en Aldebarán. Tú piensas donde quieres ir y la nave lo interpreta.
Aumenta tus deseos y allí estarás.
No existe viaje en sí pues toda
distancia desde el éter se lleva a cabo de manera instantánea y sólo se percibe
como un período de tiempo lineal desde la percepción interior de la nave
(Tiempo SIT), pero solo es una ilusión más creada por la mente misma de sus
ocupantes.
De esta manera da lo mismo retroceder
al día de ayer que a 100.000 años atrás. Da lo mismo viajar en vuelo
supra-luminar desde Florida a Los Ángeles, que desde Florida a la Galaxia de
Andrómeda.
Espacio y tiempo superpuestos
Cada frecuencia y sus armónicos
dependen de una tasa de tiempo la cual es el resultado de los cambios en la
intención y atención de la conciencia del observador.
El tiempo es una percepción dada por el
orden de los conceptos en la consciencia del observador y de la velocidad con
la que secuencia sus ideas, por lo tanto es el resultado de una conciencia.
Cuanta más conciencia tenga el observador, más conceptos podrá manejar y a mayor
velocidad, ya que podrá procesar más percepción de datos.
Esta percepción determinará la densidad
de existencia que perciba el observador siendo que una tasa más alta
significará armónicos de una frecuencia más rápidos y complejos que podrá crear
dentro de un campo de energía potencial.
Desde el éter se puede llegar a todos
los lugares del mundo físico incluyendo todos los puntos en el tiempo de esos
lugares. Esto es así pues, el estar en el éter implica manifestar todo lo que
existe pues solo es un punto de vista equivalente a una frecuencia.
Si se cambia el punto de
vista-frecuencia desde el éter, ya se está en el lugar deseado sin necesidad de
viajar ni moverse, sino sólo cambiando la frecuencia de los motores de la nave
a fin de hacerlos compatibles con estar en otra frecuencia que también será un
punto específico en el tiempo.
Todo existe de manera superpuesta y
solo se percibe un lugar y posición temporal cuando se tiene compatibilidad
energético frecuencial.
Cuando un lugar tiene una frecuencia y,
al igualarla, se convierte en la misma frecuencia indistinguible de ella.
Solo a través del filtro de frecuencias
que es el toroide, podemos ver o experimentar un lugar en el espacio tiempo. Si
encendemos un filtro, percibimos estar en las Pléyades-Erra, y con los motores
cambiamos el filtro, y de repente percibimos estar en la Tierra. Nada ha
cambiado, solo es nuestra percepción lo que modifica lo que vemos.
Si tienes un aparato de radio para
escuchar música y sintonizas el 102.5 FM escuchas a Richard Wagner; si le das
vuelta al dial y sintonizas 92.4 FM, escuchas música pop. Ambas frecuencias ya
estaban ahí, en el mismo espacio. Solo es el filtro de nuestra atención lo que
nos permite escuchar a Wagner o a la música pop. La radio no se mueve.
Mapeando el universo
En vuelo supraluminar una nave puede
viajar directamente a destino (sin escalas), o bien hacerlo por lapsos.
Si se desea estar en un punto medio
entre dos distancias, solo se debe programar el salto a ese punto específico o
bien dar una serie de saltos cambiando el vector de movimiento viéndose el
vuelo supraluminar desde la perspectiva de un mapa de distancias y posiciones
tradicional.
El dar saltos en puntos pre-programados
es la única manera de trazar una trayectoria de vectores de movimiento para una
nave que se desplaza a través del éter en donde no hay tiempo, ni distancias,
ni posiciones en un mapa.
Se entiende que si se tiene un destino
definido, por ejemplo de Taygeta a la Tierra, el detenerse en sitios o planetas
en el camino no reviste mucha utilidad práctica. Sin embargo, esta situación
cambia si se tiene el propósito de ir trazando mapas de frecuencias espaciales
interestelares con el fin de mejorar el detalle de los ya existentes y crear
nuevos mapas de sitios inexplorados.
Siguiendo con este objetivo el mapear
un área determinada puede hacerse de dos maneras diferentes:
1-. Una nave se detendrá
momentáneamente en el espacio profundo y vacío, tomará en ese punto la lectura
de gravedad y frecuencias del éter, lo grabará en la memoria del ordenador y
proseguirá al siguiente punto. De esta manera se podrá ir superponiendo las
frecuencias específicas de cada punto en un mapa tradicional de distancias con
sus respectivos puntos de frecuencias éter.
2-. Comprendiendo el flujo gravitatorio
o éter en el espacio profundo, se puede saber matemáticamente que procedería en
el punto sin explorar.
Por ejemplo, viendo este patrón
sencillo:
2+2=4, 4+2=6, 6+2=8. Es el espacio
conocido
1320: Es el espacio desconocido sin
mapas
Si sabemos que la dinámica matemática
de los armónicos de frecuencia del éter en ese lugar es la suma anterior más 2,
entonces la dinámica de matemática del éter de un lugar desconocido adyacente
al conocido concluye que 1320 de frecuencia de éter tiene en su espacio
inmediato a 1318 y luego a 1322. Si bien la nave no tomó las lecturas 1318 ni
1322, sabe matemáticamente que se encuentran ahí.
Si bien los números de las verdaderas
frecuencias poseen 18 ceros interactuando con fórmulas matemáticas en extremo
complejas que reflejan la interacción matemática de los armónicos de frecuencia
de flujo de éter-gravitatorio de un lugar, todos obedecen al mismo
principio.
De esta manera se puede saber
matemáticamente a partir de lecturas de un lugar la relación de éste con el
próximo, pues tenderá a ser acorde con los mismos principios matemáticos
permitiendo predecir un mapa de frecuencias estelares sin la necesidad de que
una nave tome las lecturas de cada lugar.
En resumen: Al conocer la dinámica
matemática del espacio conocido se puede saber la dinámica matemática del
desconocido.
Ya se mencionó que el mapa estelar de frecuencias
reemplaza lugares y objetos –tales como planetas y sistemas estelares- por sus
valores numéricos de frecuencia energética. De esta manera, los objetos de gran
masa obtienen un valor de frecuencia numérica alta y los objetos pequeños un
valor de frecuencia numérica baja. Sin embargo, los lugares aparentemente
vacíos como el espacio profundo, no reciben una frecuencia equivalente a cero,
sino una nomenclatura de frecuencia-energética baja toda vez que el espacio no
está vacío sino que es el medio a través del cual se transmiten las ondas
gravitatorias que formarán objetos cuando posean una armónica correcta y
sustentada.
El éter es el espacio conocido y el
desconocido por igual. El éter es la gravedad y la gravedad es un flujo o
corriente dentro del éter tal como una corriente dentro del océano es parte del
océano.
Es solo espacio de un solo plano,
debiendo agregarle los planos temporales que se sobreponen respecto de pasado-presente-futuro.
Flujos gravitatorios
Hay que tener en cuenta, a su vez, que
las frecuencias de flujo de éter son variables y no obedecen a factores fijos
como 1320 sino que están en una progresión de frecuencias numéricas
desplazándose en lo que se percibe desde las conciencias de la nave como
tiempo.
Y por eso es un armónico de una
frecuencia, pues no es una frecuencia fija sino una secuencia matemáticamente
perfecta que origina lo que se percibe como un lugar.
Es música, pues la música es una
secuencia perfectamente entrelazada de frecuencias con relaciones entre sí de
cada nota o grupo de notas que la forman la música.
El “tempo” en la música, el ritmo, la
duración de cada nota y cómo éstas se relacionan con las que emiten los demás
instrumentos, forman una sopa auditiva de ondas sonoras dentro de la sala de
conciertos, que no dejan de ser ondas sonoras que, con la intervención de una
conciencia, adquieren significado como un concierto, como arte, como música,
como algo bello.
Lo mismo sucede en el éter donde las
armónicas de una frecuencia se desarrollan de manera perfectamente calculable
entre sí, más no iguales creando una sopa de frecuencias donde cada armónica
creará las ondas estacionarias que, a su vez, formarán los objetos que vemos en
cada lugar.
La sopa de ondas sonoras dentro de la
sala de conciertos sería equivalente a los flujos gravitatorios dentro del
éter, y sólo con la intervención y la interpretación de una conciencia se puede
descifrar como un concierto o un lugar material.
Soles, planetas, civilización y todo lo
demás sólo son flujos gravitatorios interpretados por una conciencia que los
convierte en algo con un significado.
Una secuencia armónica constructiva es
aquella que suma 9, por ejemplo 432, pues promueve la formación de ondas
estacionarias acordes a las frecuencias de mente o conciencia y las
alienta.
Si no es una secuencia perfecta
matemáticamente precisa (música), la onda estacionaria se colapsa desintegrando
la materia y regresando de nuevo al éter.
Por lo tanto, para crear música más
compleja y pasar de una sola flauta a un concierto completo, se deben ir
agregando algoritmos matemáticos que rigen las ondas sonoras, todo
perfectamente entrelazado a fin de crear un concierto completo y complejo.
De la misma manera, las ondas
estacionarias también van creando cosas más y más formas complejas como
sistemas solares, planetas y constelaciones a medida que aumentan de
complejidad y en sus armónicos.
Naves acordes al mapeo
Si el objetivo es mapear un área
pequeña como un sistema solar, la nave se puede mover con motores de gravedad o
de jets de plasma mientras se toman valores de lectura de gravedad en el
ordenador.
Sin embargo, para mapear áreas más
grandes tales como constelaciones enteras, la velocidad otorgada por un motor
gravitatorio o de jet de plasma es muy baja e impide la realización de mapa
estelar en un periodo de tiempo aceptable para la tripulación de una nave
(Tiempo SIT o medido desde el interior de la nave tal como es percibido por la
tripulación).
En estos casos se recurre a saltos a
velocidad supraluminar de un punto calculado al siguiente que, si bien deja
espacios de salto sin medir, el contar con las lecturas de flujo y valores de
gravedad entre los puntos medidos, resulta suficiente para que el ordenador
pueda llenar los espacios vacíos con los valores correctos dado que se conocen
los algoritmos de una frecuencia de esas áreas.
Ordenador cuántico
Mapear un espacio requiere de una
referencia y ésta es la lectura de la gravedad.
Si bien se puede efectuar el mapeo de
manera directa con conexión de conciencia con el Todo, con la fuente, los datos
necesarios para guiar naves a través del espacio profundo sin explorar se
expresan en números y valores de medición en el orden de trillones de trillones
de datos, por lo que con mente-conciencia resulta difícil manejar tales
cifras.
De ahí que se deje al ordenador el
efectuar los cálculos necesarios pues, de todos modos, también esto implica
acceder a la fuente, toda vez que el ordenador cuántico de la nave está
diseñado para acceder al éter calculando probabilidades en un campo cuántico
(éter) y a las líneas temporales asociadas a la conciencia que observa todo
esto (en este caso la conciencia del ordenador) la cual emula o incrementa el
rango de poder de quien está pilotando la nave.
Mucho por mapear
No es posible mapear todo el universo.
Lo más común son corredores en el espacio que se pueden usar, como una red, en
donde algunos puntos en el espacio son altamente transitados y se conocen bien,
tales como la Vía Láctea y M33 entre otras galaxias.
También se puede explorar utilizando
solamente algoritmos matemáticos y comparándolos con lo que ya se tienen por ir
a explorar otras galaxias. Sin embargo es más lo que se desconoce de lo que sí
se conoce, a pesar de que todo en el éter existe a la misma distancia y desde
allí se accede a la misma velocidad.
Por otro lado las variables resultan
demasiadas al entrar en líneas temporales y de ahí el problema de que muchas
naves salen a explorar y no regresan.
_______________________________________
Navegación estelar [artículos relacionados]
_______________________________________
Importante: Este material ha sido extraído de los
vídeos originales que se citan al pie, compilado y modificado en su sintaxis
por "taygeteanos", sin quitar la esencia del mensaje original.
Véase la transcripción oficial, original y completa
efectuada por Toni
Ruiz de Sociedad Taygeta
Información provista por S'Warúu, de Erra
Vídeos originales de la saga completa de navegación
estelar:
* Navegacion
Estelar Extraterrestre, Viajes en Tiempo, Mapas InterEstelares: Swaruu de Erra
(Pleyades)
* Moviendo
por el Éter - Conciencia y Navegación Estelar (Mensaje Extraterrestre-Pleyades)
(Parte 6)
* Viajes
en Tiempo: Manipulación Temporal (Cambios del Pasado para Cambiar el Futuro):
Swaruu de Erra
Canal: Agencia Cósmica
_______________________________________
No hay comentarios.:
Publicar un comentario